“No viene gente a Piriápolis por la Fiesta de la Cerveza organizada por Rotary Piriápolis. Hay que hacer eventos que realmente eleven el nivel”, señaló Ana Laura Martirena, presidenta del Centro Comercial de Piriápolis, en una entrevista para RADIO RBC. “Rotary no cumplió con lo que se comprometió, y nosotros se lo advertimos”, agregó Martirena.
Piriápolis, según la presidenta del Centro Comercial, debe ser mejor cuidado por el municipio. “Necesitamos que Piriápolis sea observado desde una nueva perspectiva, que se lo vea como lo que es: el segundo balneario más importante del país. Es fundamental que reciba el brillo que realmente merece. Somos un balneario hermoso que atrae a los turistas, pero necesitamos cuidar y mantener en condiciones óptimas los paseos turísticos. Hace falta mejorar las calles y veredas. No basta con tapar baches, necesitamos llevar a Piriápolis a un nivel superior”.
La Fiesta de la Cerveza, uno de los eventos más importantes organizados por Rotary, fue uno de los puntos de conflicto. “Cuando Rotary nos convocó en agosto para hablar sobre la fiesta, sabían de la preocupación de los comerciantes, ya que el año anterior hubo malestar con el evento. Muchos comercios expresaron su incomodidad, especialmente durante el invierno, cuando Rotary visitó los negocios”, explicó Martirena.
La propuesta de Rotary era destinar una suma de dinero a la comunidad. En un primer momento se habló de quinientos mil pesos, pero después un concejal reveló que la cifra era de trescientos mil. El Centro Comercial propuso colaborar para reunir ese monto, con la idea de evitar que los comerciantes tuvieran que financiar un evento que no generaba beneficios directos para Piriápolis. Sin embargo, la respuesta de Rotary fue apoyar la fiesta, lo que Martirena consideró una falta de apoyo al comercio local.
“A pesar de nuestra propuesta de trabajar juntos para conseguir el dinero necesario, Rotary decidió seguir adelante con el evento. La mayoría votó a favor de la fiesta, y sentimos que nos dieron la espalda, porque nuestra propuesta era fortalecer el comercio local y evitar que los costos de la fiesta afectaran aún más a los emprendedores de Piriápolis”, lamentó.
Martirena también mencionó que el año pasado, la Aduana incautó mercadería en la fiesta, lo que generó dudas sobre la calidad de los productos vendidos. Este año, aunque no hubo intervención de la Aduana, un puesto que había sido incautado en 2024 se mantuvo en el evento, lo que consideró un incumplimiento de los compromisos asumidos por Rotary. Además, relató el caso de un emprendedor local que intentó pagar por su lugar en la fiesta, pero le informaron que no había disponibilidad, a pesar de que estaba dispuesto a abonar los 22.000 pesos que cobraban por el puesto.
“En resumen, todo el proceso falló. No se cumplieron los compromisos, y el evento no benefició a los emprendedores ni a Piriápolis”, concluyó Martirena.
Leave a comment