La Organización Mundial de la Salud (OMS) mantiene el seguimiento de diversas variantes de SARS-CoV-2 clasificadas como “bajo monitoreo” o “de interés”.
Entre ellas se encuentra NB.1.8.1, conocida como Nimbus, identificada en mayo y actualmente en aumento en varios países, con una severidad estimada leve. También se monitorea XFG, llamada Stratus o Frankenstein, detectada con mayor frecuencia en el centro de India y originada por la recombinación de dos sublinajes de Ómicron.
Otras variantes bajo observación son LP.8.1, en descenso en Sudamérica y Europa, así como XEC y KP.3.1.1, ambas en retroceso. Por su parte, JN.1 continúa clasificada como “variante de interés” con baja prevalencia y severidad leve, siendo considerada la base común de las variantes predominantes en 2025.
Las diferencias entre estas variantes son genéticas y relativamente pequeñas (entre tres y diez mutaciones en la proteína Spike), aunque pueden influir en la transmisibilidad y en la evasión parcial de la inmunidad. Todas comparten mutaciones relevantes como F456L y Q613H.
En Sudamérica se ha confirmado la circulación de Nimbus y Frankenstein en Brasil; y de LP.8.1, XEC y, más recientemente, Frankenstein en Argentina, donde la actividad viral continúa siendo baja (8 casos positivos en 80 muestras analizadas durante la última semana de julio).
En Uruguay, la secuenciación genómica de 12 muestras de centros centinela confirmó la presencia de variantes del clado 25C XFG.2 y XFG.3 (Frankenstein), así como de Nimbus. También se identificaron recombinantes del linaje XFC y otros detectados previamente en el año.
Hasta el momento no se han registrado aumentos en hospitalizaciones ni en mortalidad asociados a estas variantes. La circulación del SARS-CoV-2 en el país se mantiene baja, con valores de positividad cercanos al 2%. En este período predominan otros virus respiratorios, como influenza y VRS.
Los síntomas más frecuentes de estas nuevas variantes son dolor de garganta intenso, fatiga y fiebre leve. Si bien podrían presentar mayor transmisibilidad y cierta evasión de anticuerpos, las vacunas actualizadas contra JN.1 mantienen eficacia protectora.
La situación continúa bajo estrecho monitoreo, y se informará oportunamente a la población en caso de cambios relevantes.
MSP
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