En el programa Radio con Todos, participaron integrantes de Alternatus Uruguay, Ignacio Etchandy e Iracema Bisaiz, quienes compartieron su experiencia en los rescates de serpientes.
Ignacio explicó que “los accidentes ofídicos en la zona no son masivos”. Señaló que anteriormente el CIAT (Centro de Información y Asesoramiento Toxicológico) manejaba un promedio de cien accidentes ofídicos al año en todo Uruguay, pero actualmente la cifra ha disminuido a sesenta. “Contrario a lo que la gente cree, el hecho de encontrarse más serpientes no implica necesariamente que se produzca un accidente”, subrayó.
Cuando se les preguntó qué hacer en caso de una mordedura de serpiente, Iracema explicó: “Lo primero es tener a mano el número del CIAT. Desde 1986, es obligatorio denunciar los accidentes ofídicos. Si la persona no lo hace, lo harán en el hospital. El CIAT cuenta con médicos toxicólogos especializados que brindan las primeras indicaciones, ya que no todos los accidentes son iguales. Algunos no son graves, mientras que otros sí lo son”.
Agregó que el CIAT también informa cuál es el centro de salud más cercano que dispone de suero antiofídico, dado que no todos lo tienen. “Por ejemplo, la policlínica de Piriápolis no cuenta con suero, pero en Pan de Azúcar sí lo tienen”, mencionó.
Finalmente, Iracema resaltó la importancia del suero antiofídico: “Es lo único que contrarresta el veneno de la serpiente, y debe ser administrado por personal médico capacitado. A veces la gente improvisa remedios caseros que pueden ser perjudiciales para la salud. Lo fundamental es acudir al hospital, llamar al CIAT y seguir sus indicaciones”.
