El artista británico ha criticado la ofensiva y la matanza del ejército israelí en Palestina, lo cual le ha valido críticas y repudios de movimientos sionistas y pro sionismo en varios países. “No quisiera estar en sus zapatos y tener que cargar con el estigma de recibir a uno de los principales vomitadores de discursos de odio del planeta”, dijo el presidente del Comité Central Israelita del Uruguay.
El artista británico, Roger Waters, uno de los históricos integrantes de la emblemática banda Pink Floyd, llega al Uruguay para dar un concierto en una de las giras más esperadas por la fanaticada del mundo. El viernes próximo, se presentará en el Estadio Centenario su show “This is not a drill” en donde repasa sus más grandes éxitos y algunos temas de elección personal.
Sus posiciones políticas, en contra de Israel, del sionismo y de la masacre que está perpetrando el ejército israelí en Palestina, le han valido críticas y repudio por parte de grupos pro israelíes y pro sionismo, que defienden la respuesta del gobierno de Benjamin Netanyahu a los ataques del grupo extremista Hamás del 7 de octubre pasado.
Hasta ahora, dos cadenas hoteleras han rechazado recibirlo en sus instalaciones en Montevideo: se trata del hotel Hyatt Centric, y la cadena Regency, que tiene varios hoteles en el país.
Presionan al Sofitel Carrasco para que no reciban a Roger Waters
Según informó el periodista Pablo Londinsky en Azul FM, los dos hoteles ya confirmaron que aplican el derecho de admisión y no recibirán a Waters y su equipo. “Ni siquiera está confirmado que vaya a dormir en Montevideo», contó Londinsky. Es altamente probable que, después del recital en el Centenario, sea enviado directamente a Buenos Aires en donde tiene agendados dos recitales el 21 y 22 de noviembre próximos.
El problema es que allá también los hoteles están alineándose con las voces pro sionismo y rechazaron recibir a Waters: medios locales aseguran que los hoteles Faena y Alvear se suman a esta cuestionable lista.
Por su parte, el presidente del Comité Central Israelita del Uruguay, Roby Schindler, emitió una carta al Sofitel para que se le prohíba el hospedaje a Waters allí. “Tal vez usted no sepa, y no lo culpo por eso, que Roger Waters es un misógino, xenófobo y antisemita, que aprovecha su fama como artista para mentir y vomitar su odio hacia Israel y todos los judíos”, expresa en la carta que dirige al gerente general de Sofitel.
“Al recibirlo, usted será, aunque no lo quiera propagador del odio que este señor destila y estará contribuyendo a aumentar la judeofobia (esto es, odio a los judíos) en nuestro país”, añade.
“No quisiera estar en sus zapatos y tener que cargar con el estigma de recibir a uno de los principales vomitadores de discursos de odio del planeta”, concluye Schindler.
Pro Hamas
En una entrevista con el periodista Glenn Greenwald, Waters puso en duda el papel de Hamas en un ataque a Israel el 7 de octubre, sugiriendo que podría haber sido una “operación de bandera falsa“.
Afirmó que hay algo “muy sospechoso” en cómo el ejército israelí fue sorprendido y cuestionó el relato de lo que hizo Hamas durante la invasión.
Waters argumentó que la masacre había sido exagerada por los israelíes, quienes, según él, inventaron historias sobre el asesinato de bebés. Además, defendió la resistencia a la ocupación por parte de los palestinos como una obligación legal y moral según las Convenciones de Ginebra, y sugirió que los primeros 400 muertos en el conflicto podrían haber sido personal militar israelí, lo que en su opinión no constituiría un crimen de guerra.
Finalmente, Waters expresó su incertidumbre sobre la veracidad de la información disponible, señalando que es difícil saber realmente qué sucedió.
LaRed21 / NA / foto: Roger Waters