La Secretaría de Comunicación Institucional de la Presidencia divulgó este jueves 30 el informe “La nueva Policía”, que detalló los resultados alcanzados a partir de los cambios que se implementan, en particular, en la formación de los efectivos, la incorporación de tecnología y la organización del cuerpo. Una de las herramientas exitosas es el Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO).
La nueva Policía uruguaya se basa en la reestructura administrativa que llevó adelante el Ministerio del Interior, encabezado por Eduardo Bonomi, y en la nueva ley orgánica promulgada en 2015, que permitió, entre otros tópicos, descentralizar Montevideo, con el consecuente despliegue en todo el territorio, modernizar la tecnología en comunicaciones y mejorar el tiempo de respuesta a través del sistema de emergencia 9-1-1.
También posibilitó georreferenciar los puntos calientes del delito en Uruguay, profesionalizar la investigación criminalística, científica y el patrullaje, aspecto este último en el que se destaca el PADO, que comenzó a funcionar en Montevideo y su zona metropolitana, que abarca zonas populosas de Canelones y San José, y se extenderá a partir de enero a las fronteras con Argentina y Brasil. Para esa ampliación, la cantidad de efectivos crecerá de los 1.000 actuales a 1.500.
A esos cambios se agregan la modernización del equipamiento para combatir al narcotráfico y microtráfico, la instalación de cámaras de videovigilancia para cubrir en la actualidad a casi todo el territorio nacional, otras transformaciones y, especialmente, en el modo de capacitar al personal policial, optimizando la curricula y, sobre todo, dignificar el servicio para mejorar la calidad de vida de los funcionarios.
