El pasado 14 de noviembre, en horas de la mañana, el servicio de emergencias 9-1-1 recibió una alerta que indicaba que en una vivienda ubicada en la calle Libertador Juan Antonio Lavalleja, en la ciudad de San Carlos, una mujer y su bebé estaban siendo agredidos por un hombre.
De forma inmediata concurrió personal de la Unidad de Respuesta Policial Móvil (URPM) de la Zona Operacional III, junto a efectivos del Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO III) y del Área de Investigaciones de Zona III. Una vez en el lugar, los policías se entrevistaron con una mujer mayor de edad, quien manifestó que momentos antes su pareja se había tornado agresiva, expulsándola de la vivienda e impidiéndole retirar al bebé en común, a quien también había agredido.
Los efectivos intentaron dialogar con el agresor para que depusiera su actitud; sin embargo, el hombre —mayor de edad y con antecedentes penales— empujó a los policías, lesionó a uno de ellos y huyó corriendo. El bebé fue asistido y se constató que se encontraba en buen estado. Tanto él como su madre fueron derivados a dependencias policiales.
Enterada de los hechos, la Fiscalía Departamental de San Carlos especializada en Violencia Basada en Género, Doméstica y Sexual, de Primer Turno, dispuso la activación de los protocolos correspondientes y la intervención del Juzgado Especializado de 3.er Turno, el cual determinó medidas cautelares y la requisitoria del indagado.
En horas de la tarde, personal de URPM III acudió nuevamente al domicilio del individuo tras recibirse información de que se encontraba retirando pertenencias de las víctimas hacia la vía pública. En el lugar fue detenido, ya que pesaba sobre él una orden vigente de arresto. La Fiscalía dispuso su conducción al despacho para continuar con las indagatorias.
Finalizadas las actuaciones, ese mismo 14 de noviembre se celebró una audiencia en el Juzgado Letrado Especializado en Violencia Doméstica, de Género y Sexual de 3.er Turno de San Carlos, donde el agresor fue formalizado por la presunta comisión de un delito de violencia doméstica agravada, en reiteración real con un delito de agravio a la autoridad. Como medida cautelar, se dispuso su prisión preventiva por un plazo de 90 días.
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