Nelson Vicente, presidente del Centro de Hoteles y Restaurantes de Piriápolis, participó en el programa Radio con Todos de RBC y abordó la percepción de que las casas rodantes no son bien recibidas en la ciudad o que se sienten perseguidas. “Eso me parece fuera de lugar y lo rechazo completamente, porque en Piriápolis el turismo es absolutamente abierto a todos”, afirmó.
Vicente aclaró que siempre y cuando se respeten las ordenanzas y reglamentos de tránsito, no hay problema. “El malestar de algunos es que no se permite estacionar en la rambla, en primera línea de playa”, explicó. Resaltó que existen decretos y ordenanzas municipales que prohíben el estacionamiento y la pernocta de casas rodantes en la franja costera que va desde Playa Grande hasta Punta Negra.
En cuanto a la falta de sitios adecuados para este tipo de turismo, Vicente mencionó que hay varios campings disponibles, incluyendo el Parque La Cascada, que ha sido parcialmente remodelado con mejoras en los baños y otras instalaciones. “Nos encanta que vengan, ya que generan un movimiento económico importante al acudir a supermercados, almacenes, panaderías y otros comercios”, añadió.
Vicente destacó que en Piriápolis nunca se han cerrado las puertas a los motorhomes, campers o casas rodantes. Sin embargo, enfatizó la importancia de respetar las normas de tránsito como base de la convivencia. “Puedo entender la incomodidad de quienes han invertido en propiedades frente al mar y ven obstruido su horizonte, o cuando las casas rodantes se instalan con campamentos improvisados en las veredas, lo cual no beneficia la imagen de nuestra rambla”, concluyó.
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Tenemos un carrito de panchos arriba de la vereda en la esquina oeste del Hotel Argentino desde hace unos días, una imagen preciosa.