Bomberos de Piriápolis han tenido una intensa actividad en los últimos días. El descuido y el uso de pirotecnia han provocado varios focos ígneos, que pudieron ser controlados con éxito, aunque desde el destacamento se insiste en la necesidad de extremar los cuidados.
El jefe del Destacamento de Bomberos de Piriápolis, oficial Luis Parreño, señaló al informativo central de RADIO RBC que “desde el río Negro hacia el sur nos encontramos con un índice de riesgo color rojo, lo que implica una gran probabilidad de incendios forestales. Esta situación se viene registrando desde hace varios días. Mientras que en el norte del país se han registrado lluvias abundantes, en nuestra zona han sido escasas o nulas”.
En ese contexto, Parreño exhortó a la población a extremar las precauciones, especialmente en lo que respecta a la realización de fuegos para cocción de alimentos. Indicó que en los últimos días se ha incrementado la cantidad de intervenciones, muchas de ellas vinculadas a accidentes domésticos durante la preparación de comidas.
Uno de los episodios recientes se produjo por la falta de cuidados durante una cocción, lo que generó una importante acumulación de humo en el interior de un apartamento. De forma preventiva, dos de los moradores debieron ser trasladados por inhalación de monóxido de carbono.
El jerarca recordó que el destacamento cuenta con el refuerzo de una brigada forestal integrada por 13 funcionarios adicionales, bomberos temporales. Este apoyo permite atender incendios tanto en la zona como fuera del departamento. En ese marco, se debió enviar personal a la ciudad de Minas, específicamente al cerro La Coronilla, para colaborar ante la misma problemática de altas temperaturas y bajo índice de humedad que afecta a toda la región.
Consultado sobre el mensaje a turistas y residentes, Parreño fue enfático: “Exhortamos a todos, especialmente a los veraneantes y visitantes, a extremar los cuidados. Sabemos que la población estable de Piriápolis está muy consciente, pero es fundamental que todos, al realizar cocciones, se aseguren de apagar completamente el fuego. Los leños continúan ardiendo lentamente luego de terminado el asado y pueden moverse o caer, generando nuevos focos”.
En ese sentido, recomendó mojar abundantemente las brasas y eliminar cualquier riesgo, ya que se han registrado incendios varias horas después de finalizada una comida. “Son situaciones que no se esperan y que pueden causar daños materiales y lesiones a las personas”, advirtió.
Asimismo, recordó que está terminantemente prohibido realizar quemas de cualquier tipo.
Finalmente, informó que el pasado domingo se registró un principio de incendio en Solís, originado por la manipulación de pirotecnia en la zona de la anteplaya. “Si esto hubiera ocurrido en áreas más forestadas, las consecuencias podrían haber sido muy graves. Ahora que se aproxima el 31, reiteramos el llamado a la precaución. Una acción irresponsable puede afectar seriamente la temporada estival y poner en riesgo a visitantes y residentes”, concluyó Parreño.
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