Kiev vivió este sábado su peor amanecer desde que Rusia comenzó la invasión del territorio vecino el pasado 24 de febrero.
Los enfrentamientos estallaron en las calles de la capital ucraniana, en el tercer día de la invasión rusa a Ucrania.
“Hay combates en las calles de nuestra ciudad en este momento”, detalla la agencia ucraniana Interfax.
Hasta el momento, la capital permanece en manos ucranianas.
Funcionarios ucranianos dicen que la situación está “bajo control” en la ciudad y en las afueras.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, advirtió a los ucranianos que “no pueden permitirse perder” Kiev.
Y este sábado por la mañana, el presidente difundió un nuevo video, esta vez desde las calles de la ciudad.
“Hay mucha información falsa en redes que dice que le pedí al ejército que deponga las armas y que estamos evacuando”, dice.
“Estoy aquí. No depondremos las armas. Defenderemos nuestro Estado”.
“Lamentablemente, según datos operativos, tenemos 198 muertos, entre ellos 3 niños, y 1.115 heridos, 33 de los cuales son menores de edad”, afirmó el ministro de Sanidad de Ucrania, Víktor Liashkó, en su cuenta de Facebook, este sábado (26.02.2022).
Se trata del segundo parte de fallecidos que publica el Gobierno ucraniano tras el que anunció el jueves por la noche el presidente Volodímir Zelenski, cuando dijo que había tras el primer día de la ofensiva militar rusa 137 fallecidos.
El ministro de Sanidad denuncio que las tropas rusas, a las que calificó de terroristas, han “disparado deliberadamente contra ambulancias”, y sugirió la entrega de chalecos antibalas al personal médico.
Liashko aseguró que “el sistema médico sigue funcionando, el ministerio por su parte hace lo posible e imposible para conseguir todo lo necesario para los hospitales”.
Recordó que, pese a la guerra, el coronavirus “no se ha ido a ningún lado”, por lo que los pacientes ingresados en las unidades de cuidados intensivos “siguen necesitando oxígeno”.
bbc / dw