En la Cámara de Diputados se presentó ayer un proyecto de ley de un artículo único para designar con el nombre de Pascasio Báez Mena a la escuela N° 61 de la ciudad de Pan de Azúcar, en Maldonado.
En una exposición de motivos de una carilla, la iniciativa presentada por el diputado colorado Sebastián Sanguinetti señala que Báez fue un peón rural “asesinado por la guerrilla tupamara”, el 21 de diciembre de 1971, cuando tenía 46 años de edad.
“Era casado, tenía hijos y trabajaba como peón rural haciendo diferentes tareas para establecimientos de la zona de la ruta 9, a 10 km de la ciudad de Pan de Azúcar”, señala el texto al que tuvo acceso El País.
Allí se relata que, en octubre del año 1971, Báez estaba buscando un caballo que había ingresado a un campo lindero cuando “de casualidad” avistó a unos guardias del MLN-T “que estaban vigilando una tatucera del grupo armado”.
“En ese momento los guerrilleros apresaron al trabajador rural y lo tuvieron secuestrado durante dos meses. Finalmente, y con premeditación Pascasio Báez fue ejecutado por miembros del grupo armado con una inyección letal de pentotal”, asegura la iniciativa. Por lo que concluye que “sin duda”, Báez integra “una larga lista de víctimas que nada tenían que ver con la lucha armada que sufrió el país por aquellos tristes años”.
Según Sanguinetti, “es de justicia homenajear a este inocente peón rural”, no con la intención de “machacar” sobre el pasado, sino “para escribir la historia en forma justa y no escuchar una única campana”.
Consultado por El País, el legislador dijo que se decidió presentar la iniciativa porque “hay un reclamo histórico” de homenajear la memoria de “los dos lados”. En ese marco, señaló que en forma reciente en Canelones se inauguró un memorial para recordar a Ariel Arcos y Julio Pagardo, militantes del MLN-T asesinados en Chile en 1973, algo que informó La Diaria. “Entonces esto es histórico, siempre homenajeamos a una parte y a la otra no”, afirmó.
“Es de justicia homenajear a todos por igual y no andar clasificando a unos y a otros”, señaló Sanguinetti. Además, dijo que Báez “es una verdadera víctima porque estaba por fuera de todo”. Asimismo, señaló que “para mantener la memoria encendida” hay que contemplar los diferentes puntos de vista.
Afirmó que la escuela, a la que quiere nombrar como Pascasio Báez, está a ocho kilómetros de donde mataron al peón rural, en la localidad de Pan de Azúcar, donde residía junto a su familia.
El País / Partido Colorado
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