La obra se desarrolló en el eje de una zona de crecimiento y desarrollo con una inversión de 4 millones y medio de dólares. El intendente Enrique Antía señaló que “es el turismo que hoy quiere la gente”.
Lo dijo en oportunidad de la inauguración de la rotonda en Aparicio Saravia próximo al Parque Indígena.
El jefe comunal agradeció a todos los que trabajaron y usaron su cabeza y pienso para que se transformada en una obra tan importante y que va a dar mucho resultado.
Recordó que Aparicio Saravia estaba complicada para cruzarla a pie y que un día de recorrida con el director general de Obras Darío Camacho, esperaron casi 15 minutos para hacerlo.
Destacó que se han ido resolviendo todos esos puntos críticos y ahora quedó flor de Avenida, que une la perimetral con la ruta 104 y que en verano la circulación hacia Maldonado y Punta del Este para la gente de Balneario Buenos Aires y José Ignacio será más ágil.
Reconoció que fue una obra muy discutida porque en el lugar pasa un caño de petróleo que demandó mucho hormigón para cubrirlo.
Valoró que el paseo de El Placer se completa con las bici sendas que ingresan por el humedal y llegan hasta el Parque Indígena. Para lograr esa obra la administración expropió los terrenos que permitieron retirar la circulación de bicicletas de la avenida.
Eso posibilita que las familias puedan realizar sus paseos en forma segura, protegida y a su vez disfrutar de la naturaleza desde el Parque el Indígena hasta Punta del Este.
Anunció que en la zona también está prevista la instalación de 3 resto pub, para que la gente joven pueda sociabilizar y realizar encuentros.
Estás acciones ratifican la apuesta del gobierno departamental para que sea una zona de desarrollo del sector turístico y de disfrute.
Por su parte el director de Planeamiento Roberto Chiacchio, comentó que acá había un doble problema una curva muy importante y por otra parte la altitud.
El parque indígena tenía dos lugares de acceso muy peligrosos, uno de ellos se eliminó y el otro se revalorizó, indicó.
Valoró que se dieron soluciones de tránsito donde los vehículos ahora deben reducir la velocidad para acceder al parque, que ahora cuenta con un nuevo pórtico, cabina de entrada, reformas en los baños y parrilleros, con un cuidado paisajístico.
En tanto el gerente general de Molinsur Raul Sassaroli, habló también como vecino de la zona y comentó que cuando una iba en sentido hacia el Este se encontraba con una “boca de lobos”.
Agregó que es una obra que tiene mucho de lo que no se ve, pero se siente, porque demandó un trabajo que no se ve pero que tuvo mucho pienso puesto y requirió un esfuerzo importante.
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