El 23 de septiembre, alrededor de las 05:30 horas, el personal del Área de Investigadores de la Zona Operacional II detectó a dos individuos en la zona de Bvar Artigas, cerca del Puente de Bergalli, circulando en una motocicleta. Uno de ellos era un adulto de 20 años y el otro un adolescente de 17, quien llevaba consigo un perro de raza bulldog francés. Al ser interrogado sobre la procedencia del animal, el adolescente no pudo proporcionar una explicación coherente, lo que resultó en su traslado a las instalaciones policiales, donde se confiscó el perro. Por otro lado, el adulto presentó la documentación de la motocicleta y, al no haber una orden pendiente para el vehículo, se le permitió seguir su camino.
Minutos después, un hombre adulto se presentó en la Seccional Primera para denunciar el robo de su motocicleta de su residencia en el Barrio Jardines de Córdoba. La motocicleta tenía su propiedad registrada debajo del asiento y resultó ser la misma que había sido detenida previamente. Además, denunció el robo de tres cascos y un perro, que resultó ser el mismo perro confiscado al menor.
La Fiscalía Letrada de 2do Turno fue informada de los acontecimientos y decidió que el menor permaneciera bajo custodia policial, programando su interrogatorio en la sede fiscal para más tarde en el día. Simultáneamente, se llevó a cabo una inspección en la residencia del conductor de la motocicleta, lo que resultó en la recuperación de la motocicleta robada. La motocicleta fue incautada y devuelta a su legítimo propietario, y también se encontró un motor de motocicleta con números eliminados en el interior de la vivienda. El adulto que conducía la motocicleta fue citado para comparecer en el proceso.
Después de interrogar al menor en la oficina de la Fiscalía y llevar a cabo una audiencia en el Juzgado Letrado de 11er Turno de Maldonado, se dictó una condena por su responsabilidad como autor de un delito de hurto especialmente agravado, considerado una infracción grave a la ley penal. La sentencia impuso una pena de siete (7) meses, que se cumplirá de la siguiente manera: 1- Los primeros dos meses se llevarán a cabo mediante medidas socioeducativas que privarán de su libertad en instalaciones del INISA, 2- Los cinco (5) meses siguientes requerirán que establezca un domicilio fijo, 3- Deberá someterse a la vigilancia y orientación del INISA, 4- Presentarse una vez por semana en la Seccional policial más cercana a su domicilio, 5- Realizar seis (6) horas semanales de trabajos comunitarios y 6- Durante los primeros dos (2) meses de libertad vigilada, cumplirá arresto domiciliario nocturno de 22:00 a 06:00 horas.
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