El coordinador general de la Dirección de Gestión Ambiental de la IDM, Carlos Medina, explicó que los productos fueron destruidos una vez culminados los análisis del Laboratorio de Bromatología de la Intendencia.
Las acciones son el resultado del trabajo de la Dirección de Higiene y Bromatología y del ingreso de nuevos inspectores, a través de un llamado que efectuó la actual Administración y que “nos permitió desarrollar una tarea de campo muy fuerte en con la capacitación y el trabajo en la calle”
En ese sentido, a raíz de una alerta de la población y un procedimiento importante que se realizó en un supermercado de Maldonado, “se logró la retención de mercadería que no estaba en las condiciones reglamentarias y presentaban un estado realmente malo para el consumo”.
Se detectaron “materias primas principalmente en la parte de rotisería donde habían alimentos fuera de las condiciones óptimas”.
Medina indicó que “es un procedimiento que nos llama mucho la atención en Maldonado y más que nada si estamos hablando de una gran superficie”. Por ese motivo, es muy importante “velar por la salud de la población y nos lleva a reforzar los controles como ya veníamos haciendo hace mucho tiempo, pero con el refuerzo de los recursos humanos”.
También explicó que al margen de la incautación y destrucción de la mercadería, “se continúa el procedimiento administrativo y se analiza si la empresa tiene o no antecedentes para aplicar las sanciones”. Las multas oscilan entre las 30 y 70 unidades reajustables.
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