Desde el año 1987, la Red Mundial de Mujeres por los Derechos Sexuales y Reproductivos, como colectivo formado por activistas de distintos países, declaró el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres. Es desde entonces que ese día ha ido cobrando fuerza e importancia y en la actualidad ya pasó a ser un compromiso de muchos países, asumido como compromiso de Estado y la sociedad civil, y se organizan actividades diversas con el propósito de reafirmar el derecho a la salud como un derecho humano de las mujeres, al que deben acceder sin restricciones o exclusiones de ningún tipo.
Es por ese motivo que el Instituto Nacional de las MUJERES cada año reafirma su compromiso de impulsar políticas públicas que apunten directamente a la mejora de la calidad de vida y ejercicio de ciudadanía de todas las mujeres uruguayas-
28 de mayo
Día internacional de acción por la salud de las mujeres
La salud mental de las mujeres importa
Hoy conmemoramos el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, una jornada en la que se recuerda el derecho de las mujeres a gozar de una salud integral a lo largo de todo su ciclo vital, considerando que es un Derecho Humano universal.
En este año, nos interesa poner el foco en el impacto que ha tenido la emergencia sanitaria por Covid 19 en la vida de las mujeres uruguayas.
El trabajo no remunerado, que ya antes de la pandemia era el doble del que destinan los varones, que incluyen el cuidado de niñas y niños a cargo, personas mayores y en situación de discapacidad, además del aseo y gestión de los hogares, se ha visto incrementada por la convivencia intensiva y el cierre de centros educativos.
Esta sobrecarga física y mental de cuidar a otras personas al mismo tiempo que continúan trabajando de manera remunerada desde sus hogares —o que incluso han tenido que salir del mercado laboral formal para poder asumir los cuidados— habitualmente es invisible en los análisis económicos, incluso sanitarios.
La pandemia ha significado, particularmente, un enorme desafío para las trabajadoras de la salud. La amplia mayoría son mujeres (el personal médico es mayoritariamente femenino, el de enfermería y auxiliares de servicio representa entre el 80 y el 90% del total de personas empleadas).
En cuanto a la educación, las cifras son similares, el cuerpo docente está integrado en su amplia mayoría por mujeres. El incremento sostenido y la capacidad de adaptabilidad a las nuevas lógicas de trabajo, tienen fuertes repercusiones en la salud mental de las mujeres.
A nivel general, de acuerdo a cifras oficiales de la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), el 73% de las consultas recibidas en la línea de apoyo emocional 0800 1920, son realizadas por mujeres1, la mayoría de estas llamadas responden a mujeres mayores, que como principales causas mencionan la soledad, el aislamiento e incertidumbre.
Esta situación pone en evidencia que el concepto de salud integral no solo refiere a un hecho meramente biológico, sino también responde a factores psicosociales, que dependen directamente de los roles y estereotipos que deben cumplir las mujeres dentro de la sociedad, de la capacidad de acceso a los recursos materiales y simbólicos para vivir una vida digna, con igualdad de oportunidades, libre de violencias.
Desde Inmujeres reforzamos el compromiso de impulsar políticas públicas que apunten directamente a la mejora de la calidad de vida y ejercicio de ciudadanía de las mujeres uruguayas, en conjunto con quienes tienen a su cargo la rectoría en políticas de salud. Por este motivo se ha generado como línea estratégica para este período el área de salud mental en la estructura del instituto, que tiene como objetivo trabajar este tema desde una mirada integral.