Personal del Consulado Argentino (ubicado en Sarandí casi Florida) se presentó en la Seccional 1ra. de Policía solicitando ayuda urgente, ya que un hombre se encontraba en paro cardiorrespiratorio.
De inmediato concurrieron al lugar el Encargado de la Dependencia junto a funcionarios policiales, llevando consigo el desfibrilador externo automático (DEA) de la unidad.
Al arribar, observaron a un hombre mayor de edad, de nacionalidad argentina, tendido en el suelo en posición de decúbito dorsal, sin signos vitales y con el rostro de color violeta. De forma inmediata, los funcionarios comenzaron a realizar maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) y conectaron el DEA. Mientras tanto, otros funcionarios colaboraban conteniendo al personal del consulado, que se encontraba visiblemente afectado, y coordinaban con el servicio de emergencias 9-1-1 para solicitar una unidad médica móvil.
Luego de las indicaciones iniciales del DEA, este aplicó una descarga al paciente, quien no presentaba pulso en ese momento. Se continuó con el masaje cardíaco, y al cabo de unos minutos, el paciente comenzó a respirar y recuperó el pulso. Ante esto, el DEA no efectuó una segunda descarga, dado que el hombre ya había salido del paro cardiorrespiratorio.
Poco después, arribó la unidad de emergencia, cuyos profesionales se hicieron cargo del paciente. Tras monitorearlo, manifestaron al personal policial: “Lo sacaron de la muerte, le salvaron la vida”, y procedieron a trasladarlo a un centro asistencial.
Posteriormente, la doctora de dicho centro se comunicó con la Seccional 1ª para informar que el paciente se encontraba estable y felicitó al personal actuante por el alto grado de responsabilidad y profesionalismo demostrado, que resultó fundamental para salvarle la vida a esta persona.
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