La producción de fuentes renovables llegó al 90%, y la exportación de energía representó unos 222 millones de dólares, con Argentina como el principal cliente, indicó la presidenta de UTE, Silvia Emaldi. Además, anunció que el ente mejorará en 2023 las redes de energía eléctrica y extenderá servicios. Asimismo, previó una disminución del volumen de exportaciones debido a la ausencia de precipitaciones.
En diálogo con Comunicación Presidencial, este miércoles 4, Emaldi realizó un balance sobre la exportación de energía hasta el 31 de diciembre. “La exportación llego a un volumen importante, unos 222 millones de dólares ingresaron al programa financiero de la empresa”, detalló.
La jerarca informó que Argentina fue el principal comprador de energía, en especial en los meses de invierno, período en el que el país limítrofe requirió de las fuentes de Uruguay para abastecer su demanda de consumo.
Agregó que en 2022 la producción de energías de fuentes renovables, como agua, viento y sol llegó al 90% del total utilizado y solo 10% de la energía empleada requirió de fuentes térmicas. A modo de comparación, recordó que en 2021 el uso de energías renovables alcanzó 83% en Uruguay.
Emaldi proyectó para 2023 un volumen menor de exportaciones de energía uruguaya, como consecuencia de las escasas precipitaciones que se prevén para los primeros meses del año.
Asimismo, en base a un acuerdo con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), la empresa pública fijó un incremento del volumen de inversiones para el ejercicio. Eso permitirá la mejora de las redes de distribución de energía eléctrica, mediante la reposición de algunas redes que han llegado a su vida útil y se extenderán los servicios, ejemplificó. En ese sentido, informó que en 2022 “hubo un incremento de las necesidades de nuevos suministros, en el orden del 20%”.
Además, el aumento de inversiones permitió el ajuste de la tarifa del organismo por debajo de la inflación, indicó