En una entrevista con Agustina Flores en LA TARDE DE RBC, la Senadora frenteamplista Silvia Nane enfatizó la necesidad de dejar de desacreditar a la fiscalía y al poder judicial, y en cambio, dotarlos de más recursos para abordar el complejo problema de la inseguridad.
“Nuestro objetivo es reducir la violencia. Por ejemplo, podríamos empezar por disminuir la cantidad de armas circulantes”, explicó Nane. “Actualmente, hay aproximadamente un arma registrada por cada tres uruguayos, lo cual es un completo disparate. Se estima que existen unas seiscientas mil armas registradas, pero estudios sugieren que hay al menos otro millón doscientas mil no registradas. Esto en una población de más de tres millones de habitantes es alarmante”.
Nane también criticó la falta de implementación completa de la ley de control de armas, señalando las continuas extensiones parlamentarias para regularizarla. “Llegará el momento en que debamos poner fin a estas prórrogas y comenzar a retirar armas de las calles”, enfatizó. “Debemos avanzar hacia la resolución menos violenta de los conflictos”.
La senadora subrayó que la reinserción social de los infractores no debe limitarse al enfoque punitivo. “Es crucial ayudar a las personas a reintegrarse a la sociedad de manera sostenible, sin dañar ni a ellas ni a la comunidad”, comentó. “Esto requiere un esfuerzo continuo tanto a nivel individual como comunitario”.
Respecto a un posible acuerdo bipartidista en temas de seguridad, Nane expresó su esperanza, pero advirtió que cualquier acuerdo debe dejar de lado la desacreditación constante de las instituciones judiciales. “Es fundamental dotar de mayores recursos al poder judicial, a la fiscalía y a la defensoría pública, y garantizar la confianza en estas instituciones. El desprestigio constante no contribuye a construir una sociedad segura”.
“El Instituto Nacional de las Mujeres, que se creó como parte del plan nacional de emergencia en violencia basada en género, no ha logrado abordar adecuadamente esta problemática. A pesar de las cifras alarmantes (cuatro mil novecientos once casos), es importante destacar que no se trata solo de denuncias, sino de casos reales con nombres y apellidos. La situación es aún más preocupante, ya que el número de casos sigue aumentando de manera significativa”, dijo.
Además, el año pasado, el veinte por ciento de los niños y niñas que ingresaron al Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU) lo hicieron debido a la causal de pobreza. Esto significa que los hogares empobrecidos no pueden cuidar adecuadamente a sus hijos, y estos quedan bajo la responsabilidad del Estado.
En este contexto, se ha propuesto la intervención militar y el allanamiento nocturno como nuevas “balas de plata” para combatir la inseguridad. Sin embargo, es importante reconocer que no existe una solución única y definitiva, agregó Nane
Finalmente, en cuanto a propuestas como la creación de un grupo multifuerza de represión para enfrentar la inseguridad, Nane fue crítica. “Durante varias elecciones se ha planteado soluciones simplistas para problemas complejos. Reducir la edad de imputabilidad no es la solución. Necesitamos abordar de manera integral problemas como la violencia de género, la protección de niños y adolescentes, y la pobreza, que están en el trasfondo de muchos conflictos”, concluyó.