La secretaria de Estado brindó una conferencia de prensa, en la tarde de este martes 9 acompañada por el ministro de Ambiente, Robert Bouvier, y el presidente de OSE, Raúl Montero. Allí, puntualizó que las recomendaciones del Ministerio de Salud Pública (MSP) a la población se efectuaron según comorbilidades y grupos de riesgo, y que fueron avaladas por las cátedras de Nefrología, Cardiología y Medicina Interna de la Universidad de la República (Udelar), la Academia Nacional de Medicina y la Comisión Honoraria de Salud Cardiovascular.
Rando recordó que esta situación está originada por la sequía persistente que afecta al área metropolitana desde hace muchos meses. En ese contexto, OSE implementó una estrategia con el objetivo de salvaguardar el suministro de agua potable y evitar que el recurso se contamine bacteriológicamente, agregó. Se prevé, además que esta medida sea acotada en el tiempo.
La jerarca informó que las medidas están dirigidas en forma exclusiva a los habitantes de Montevideo, Canelones y toda el área metropolitana.
Las personas sin diagnóstico de hipertensión arterial podrán mantener el consumo habitual de agua diario, que puede ser en su totalidad proveniente de OSE, detallaron las autoridades. Según los especialistas, es recomendable no agregar sal a los alimentos para niños que estén iniciando la alimentación y, de ser posible, se debe utilizar agua mineral para la preparación de fórmulas de lactantes.
La población que utilice medicamentos antihipertensivos y diuréticos deberá disminuir al máximo el consumo de alimentos con exceso de sodio, mientras que en su caso el consumo de agua de OSE no podrá exceder el litro por día. En estas situaciones, la recomendación es completar su ingesta habitual con agua mineral.
Por último, los pacientes que padezcan enfermedades renales crónicas, insuficiencia cardíaca, cirrosis y las embarazadas deben evitar, en lo posible, el consumo de agua de OSE; y al mismo tiempo asesorarse con los médicos tratantes.
Rando reiteró que las recomendaciones son dinámicas y que están sujetas a cambio, porque dependen de los valores del sodio en el agua. “Desde la cartera nos comprometemos a mantener a la población permanentemente informada y con transparencia, respecto a los niveles de niveles de sodio en el agua y, si es necesario, ajustar las recomendaciones”, indicó.
El ministro de Ambiente, en tanto, señaló que esta es una situación que se afronta desde hace mucho tiempo. Bouvier dijo que desde hace unos meses se ha agudizado, debido al verano “extremadamente caluroso y el déficit de las precipitaciones”. “Estamos ante una situación grave que nos preocupa y nos ocupa”, sostuvo.
“Estamos convencidos de que la medida de aumentar la salinidad del agua es la medida posible en la situación actual”, añadió. También explicó que haber tomado otra medida “sería mucho más grave desde el punto de vista sanitario”.
Informó que una comisión asesora integrada por Salud Pública, Ambiente, OSE, y el Sistema Nacional de Emergencias (Sinae) analizará el impacto de las medidas en la población con mayor vulnerabilidad.