Con un crecimiento año tras año, que cuenta ya con más de 25 participantes, esta iniciativa de la Intendencia de Maldonado sumó un nuevo capítulo en el camino de la rehabilitación.
El Programa se encuentra bajo la órbita de la Dirección de Políticas de Adicciones, dependiente de la Dirección General de Desarrollo e Integración Social.
En esta oportunidad, la apuesta consiste en una ruta que lleva a la salida laboral de quienes vienen superando las adicciones y está vinculada directamente al trabajo de la cosecha de membrillos.
El director general de Desarrollo e Integración Social, Miguel Plada, explicó que durante los años más duros de la pandemia, a través de la Intendencia liderada por Enrique Antía, el INDA y diversas instituciones y empresas, se realizó una fuerte apuesta a las políticas sociales y fue en ese contexto en el cual desde el departamento de Canelones se invitó a participar de la cosecha de membrillos que serán donados a comedores y merenderos de Maldonado.
Plada sostuvo que la iniciativa se lleva a cabo mediante el Programa “Tu Nuevo Futuro”, integrado por jóvenes que vienen saliendo de las adicciones y necesitan una salida laboral. Y señaló que la materia prima – en este caso, los membrillos- son muy útiles para los comedores.
Sus protagonistas, jóvenes en recuperación, destacaron la iniciativa que los lleva a lograr una satisfacción personal doble: por un lado, poder encontrar una salida laboral; y por el otro, hacerlo para gente que lo necesita, algo que resulta impagable para ellos.
Asimismo, destacaron el plan y su efectividad para poder dejar de consumir, aunque aclaran que primero hay que querer porque se toca fondo y se pierde mucho en el camino.
El director de Adicciones de la IDM, Omar Rodríguez, aseguró que esto es parte de la inserción laboral después de iniciado el tratamiento, tareas que se suman a otras -como pintar escuelas o apoyar a organizaciones no gubernamentales-. En ese contexto, agregó que este tipo de tareas dignifica y los hace crecer.
A todo esto, el productor de Canelones que hizo la donación, José Luis Stiva, se congratuló de poder ayudar en este sentido a la recuperación de jóvenes y sostuvo que el consumo de membrillo es escaso y la producción grande, motivo por el cual que lleguen a la mesa de los comedores de Maldonado es algo loable.