El sábado pasado, Piriápolis logró una victoria significativa en la Serie I, que lo posiciona como líder. En un partido disputado en el estadio Julio César Abadí, el equipo dirigido por Mario Aguirre se enfrentó a un rival experimentado, con jugadores como el capitán Ignacio Silvera y Adolfo Lima, quienes han jugado en el profesionalismo.
Piriápolis tomó la iniciativa en el campo rival, aunque al principio encontró dificultades. Sin embargo, a medida que avanzaba el partido, comenzó a generar oportunidades en el mediocampo y en la ofensiva. A pesar de las difíciles condiciones del campo debido al mal tiempo, a los treinta y tres minutos, Federico Ramos anotó un espectacular gol desde la derecha, con un potente disparo que se incrustó en el ángulo superior derecho del arquero Germán Núñez. Este gol proporcionó la tranquilidad que Piriápolis necesitaba en ese momento del partido.
En la segunda mitad, Piriápolis mantuvo una sólida defensa. Sin embargo, a los sesenta y cuatro minutos, tras una serie de rebotes en el área pequeña de Piriápolis, Ignacio Silvera logró el empate para los Arachanes. Este fue un momento crítico para el equipo de Mario Aguirre, ya que el equipo visitante comenzó a presionar con más intensidad. No obstante, en el minuto ochenta, Federico Castellanos aprovechó un rebote dentro del área pequeña para marcar el gol de la victoria para Piriápolis, desatando la euforia entre los seguidores y el equipo de la franja.
Con esta victoria, Piriápolis se convierte en el nuevo líder de la Serie I. En otro partido de la misma serie disputado el sábado en el estadio Domingo Burgueño Miguel, Ituzaingó y Barrio Olímpico empataron dos a dos.