El presidente transfirió el mando a la vicepresidenta, Beatriz Argimón, quien lo asumió hasta el 31 de octubre, cuando Lacalle Pou retorne a Uruguay, luego de una misión oficial en Japón. El ministro de Ganadería, Fernando Mattos, destacó que el objetivo de la visita es incrementar el comercio y las inversiones entre ambos países, en especial, concretar la exportación de lengua bovina al país asiático.
Este 25 de octubre se efectuó el traspaso de mando, tras la aprobación de la Cámara de Senadores, el 17 de octubre, de la solicitud del presidente de la República, en cumplimiento de lo establecido en el artículo n.° 170 de la Constitución. Asumió el cargo la vicepresidenta, Beatriz Argimón, después de firmar el acta correspondiente, junto con Lacalle Pou y el prosecretario de la Presidencia, Rodrigo Ferrés.
El mandatario partió de la base aérea rumbo a Japón, con motivo de la visita oficial que realizará a la ciudad de Tokio, desde este martes 25 y hasta el 31 de octubre. Fue invitado por el primer ministro de esa nación, Fumio Kishida, a fin de mantener encuentros en procura de incrementar el comercio y las inversiones entre ambos países.
La delegación que lo acompaña está compuesta por el canciller, Francisco Bustillo; la ministra de Economía, Azucena Arbeleche; el ministro de Ganadería, Fernando Mattos, y el director ejecutivo de Uruguay XXI, Sebastián Risso.
Mattos destacó que esta misión no pudo concretarse en el año 2021, cuando se conmemoró el centenario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambas naciones. Añadió que se trata de un viaje muy importante, ya que Japón es la tercera economía mundial, y que el objetivo fundamental es ampliar las inversiones.
Recordó que esa nación integra el Acuerdo de Asociación Transpacífico, por lo que el presidente Lacalle Pou manifestó su intención de presentar la carta de adhesión de Uruguay. Por tal motivo, esta visita oficial es un paso relevante para incrementar los mercados.
En relación a la venta de carne, indicó que Uruguay está en un proceso avanzado de aprobación de la lengua bovina, producto muy apreciado en Japón. Nuestro país exporta este producto a Rusia, pero, debido a las dificultades políticas actuales, es bueno encontrar un destino alternativo para este producto, consideró.
El secretario de Estado afirmó que, de concretarse esta transacción, significaría una muestra de confianza al sistema sanitario uruguayo, ya que sería el primer país libre de aftosa con vacunación habilitado en el mercado japonés.
Agregó que este sería un producto destacado en la pauta exportadora uruguaya, que lo puede hacer crecer alrededor de 15 millones de dólares sobre la norma general de todos los países.