El gobierno de Armenia acusó a Azerbaiyán de extender el enfrentamiento armado más allá del enclave separatista de Nagorno Karabaj, donde los combates han dejado cerca de cien muertos.
Intensos combates se registran este martes (29.09.2020) entre soldados azerbaiyanos y separatistas armenios en Nagorno Karabaj, después de que Azerbaiyán lanzara una nueva ofensiva horas antes de una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU.
Desde el domingo, las fuerzas del enclave separatista, apoyado política, militar y económicamente por Armenia, y las de Azerbaiyán protagonizan los enfrentamientos más violentos registrados desde 2016.
“Azerbaiyán extiende la zona de combates”
El Ministerio armenio de Exteriores acusó hoy a Azerbaiyán de atacar la localidad de Vardenis, en el este de Armenia, y de extender así el enfrentamiento armado más allá del enclave separatista de Nagorno Karabaj.
El gobierno en Bakú, a su vez, acusó a Armenia de haber efectuado un ataque con artillería en la región de Dashkesan, en el oeste de Azerbaiyán, desde el territorio de Vardenis, y aseguró que habría “medidas de represalia adecuadas”.
Guerra abierta desestabilizaría Cáucaso del Sur
Al menos 95 personas, entre ellas 11 civiles (nueve en Azerbaiyán y dos del lado armenio) fallecieron hasta ahora en los combates, según los balances oficiales. Las cifras reales podrían ser más altas ya que las dos partes afirman haber matado centenas de militares enemigos.
Los combates provocaron la preocupación internacional, y la ONU, Rusia, Francia, Alemania y Estados Unidos pidieron un alto el fuego inmediato. Una guerra abierta entre Azerbaiyán y Armenia puede desestabilizar el Cáucaso del Sur, particularmente si Rusia y Turquía, las potencias regionales, deciden intervenir en los enfrentamientos.
Turquía reafirma su apoyo a Azerbaiyán
Por su parte, el Gobierno turco reafirmó su apoyo a Azerbaiyán “en el terreno y en la mesa de negociaciones”, declaró el ministro turco de Exteriores, Mevlüt Çavusoglu.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se hizo ayer eco de los rumores de que Turquía habría enviado armas, militares o incluso mercenarios a Azerbaiyán para respaldar la ofensiva de Bakú, pero no los confirmó ni negó.
Hasta ahora, el ministro de Exteriores de Azerbaiyán, Dzheykhún Bayrámov, ha negado la injerencia turca y ha declarado que la mayor parte del armamento usado por las fuerzas azerbaiyanas es ruso.
Rusia pide solución pacífica
Este martes, Rusia hizo un llamamiento a favor de una solución pacífica al conflicto. El Kremlin pidió a Turquía que trabaje por la paz en Nagorno Karabaj.
“Hacemos un llamamiento a todos los países, especialmente a nuestros países socios como Turquía, para que hagan todo lo posible para [lograr] un alto el fuego y volver a una solución pacífica de este conflicto”, dijo a la prensa el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Fuente: DW