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Hamás liberó a los últimos 20 rehenes israelíes vivos

Hamás liberó este lunes a los 20 rehenes vivos restantes que mantenía en Gaza, mientras Israel comenzó a liberar a cientos de prisioneros palestinos como parte de un alto el fuego que puso fin a dos años de guerra que devastaron el territorio, causaron decenas de miles de muertes y dejaron a muchos cautivos en manos de milicianos.

Los 20 rehenes, todos hombres, regresaron a Israel, donde se reunirán con sus familias y se someterán a controles médicos. Se espera también la entrega de los cuerpos de los 28 rehenes fallecidos, aunque el momento exacto sigue sin definirse.

Varios autobuses con prisioneros palestinos liberados llegaron a la ciudad cisjordana de Ramala y a la Franja de Gaza. Israel inició la liberación de más de 1.900 prisioneros y detenidos en el marco del acuerdo. Multitudes entusiastas recibieron a los autobuses procedentes de la prisión de Ofer, en Cisjordania ocupada. Al menos uno de ellos cruzó hacia Gaza, según informó la Oficina de Prisioneros administrada por Hamás.

Aunque persisten grandes interrogantes sobre el futuro de Hamás y de Gaza, el intercambio de rehenes y prisioneros elevó las esperanzas de poner fin a la guerra más mortífera entre Israel y el grupo armado. Se prevé además un incremento de la ayuda humanitaria en Gaza, donde varias zonas enfrentan una grave crisis alimentaria.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegó a la región para discutir el acuerdo de alto el fuego propuesto por su país y los planes de posguerra con otros líderes.

El conflicto comenzó el 7 de octubre de 2023, cuando milicianos liderados por Hamás lanzaron un ataque sorpresa en el sur de Israel, en el que murieron unas 1.200 personas, en su mayoría civiles, y 251 fueron tomadas como rehenes.

En la ofensiva posterior de Israel, más de 67.000 palestinos fueron asesinados, según el Ministerio de Salud de Gaza, que no distingue entre civiles y combatientes, pero asegura que alrededor de la mitad de las víctimas eran mujeres y niños. La ONU y expertos independientes consideran esas cifras como las más confiables disponibles. El número de muertos podría aumentar a medida que se recuperen cuerpos entre los escombros inaccesibles durante los combates.

La guerra destruyó gran parte de Gaza y desplazó al 90% de sus dos millones de habitantes. También desencadenó tensiones en toda la región, protestas globales y acusaciones de genocidio, que Israel niega.
“Gran parte de Gaza es un páramo”, declaró el jefe humanitario de la ONU, Tom Fletcher, a la agencia AP el domingo.

Rehenes liberados

En Tel Aviv, familiares y amigos de los rehenes celebraron en una plaza cuando los canales israelíes informaron que el primer grupo estaba en manos de la Cruz Roja. Miles de personas siguieron las transmisiones públicas en todo el país. Israel publicó las primeras imágenes de los rehenes liberados, entre ellas la de los gemelos Gali y Ziv Berman, de 28 años, abrazándose al reencontrarse. Los siete primeros liberados se veían pálidos, pero en mejores condiciones que algunos de los rehenes liberados en enero.

Mientras tanto, en territorio palestino, se aguardaba la liberación de cientos de prisioneros retenidos por Israel. Un vehículo blindado con bandera israelí lanzó gases lacrimógenos y balas de goma a una multitud, que se dispersó mientras drones sobrevolaban la zona. El incidente ocurrió luego de que circulara un documento que advertía que quienes apoyaran a “organizaciones terroristas” podrían ser arrestados. El ejército israelí no respondió a las consultas de la agencia AP sobre el panfleto.

Entre los prisioneros liberados hay 250 condenados a cadena perpetua por ataques contra israelíes y unos 1.700 capturados en Gaza durante la guerra, muchos de ellos sin cargos. Serán trasladados a Cisjordania, Gaza o enviados al exilio.

Un capítulo doloroso

El regreso de los rehenes cierra un capítulo doloroso para Israel. Desde su captura, los noticieros contaban los días de cautiverio, y los ciudadanos portaban pines y cintas amarillas en señal de solidaridad. Miles participaron en manifestaciones semanales reclamando su liberación. Con el paso del tiempo, los manifestantes acusaron al primer ministro Benjamin Netanyahu de demorar las negociaciones por motivos políticos, mientras él responsabilizaba a Hamás por su inflexibilidad. La semana pasada, bajo fuerte presión internacional, ambos bandos acordaron el alto el fuego.

Se prevé que los restos de los 28 rehenes fallecidos no sean devueltos simultáneamente. Un grupo de trabajo internacional buscará recuperar los cuerpos no entregados dentro de las próximas 72 horas, informó Gal Hirsch, coordinador israelí para los rehenes y desaparecidos.

Trump en Israel y Egipto

Trump llegó el lunes a Israel, donde tenía previsto hablar ante el Knéset. El vicepresidente, JD Vance, señaló que el mandatario podría reunirse con algunos de los rehenes liberados. “La guerra ha terminado”, declaró Trump antes de partir, aunque el acuerdo de alto el fuego deja múltiples interrogantes sobre el futuro de Hamás y Gaza. En su discurso ante el Parlamento, Netanyahu aseguró estar “comprometido con esta paz” y destacó que “hoy, el calendario judío marca el final de dos años de guerra”.

Uno de los principales desafíos será la exigencia israelí de que Hamás se desarme, condición que el grupo rechaza mientras exige la retirada total de las tropas israelíes. Por ahora, el ejército de Israel se ha retirado de gran parte de Gaza, incluida la ciudad homónima y Jan Yunis, aunque mantiene presencia en Rafah, en el norte del enclave y a lo largo de la frontera.

El futuro gobierno de Gaza continúa sin definirse. El plan estadounidense propone la creación de un organismo internacional que supervise la gestión del territorio, administrado por tecnócratas palestinos. Hamás sostiene que el liderazgo debe resolverse entre los propios palestinos.

Más tarde, Trump se trasladará a Egipto, donde encabezará junto al presidente Abdul Fatá el Sisi una cumbre con líderes de más de 20 países para debatir el futuro de Gaza y del Medio Oriente. Está prevista también la participación de Mahmoud Abbas, líder de la Autoridad Palestina. La presidencia egipcia había anunciado la presencia de Netanyahu, pero su oficina informó luego que no asistirá debido a una festividad judía.

El plan prevé un papel futuro para la Autoridad Palestina, aunque Netanyahu ha rechazado esa posibilidad. Se contempla un programa de reformas profundas que podría demorar años.

Asimismo, se plantea la creación de una fuerza de seguridad internacional liderada por países árabes, junto con policías palestinos entrenados por Egipto y Jordania. Las fuerzas israelíes se retirarían gradualmente a medida que esas tropas se desplieguen.

Unos 200 soldados estadounidenses permanecerán en Israel para monitorear el cumplimiento del alto el fuego.

El plan también menciona la posibilidad de un futuro Estado palestino, otro punto de conflicto para Netanyahu.

Los Angeles Times

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