En ese sentido, señaló que en invierno la situación es diferente porque el barrio cuenta con la escuela y la UTU. A través de estos centros educativos “los niños y adolescentes se mantienen integrados”, al tiempo que en verano no contaban con propuestas de cercanía. Por ese motivo, no sólo se están desarrollando proyectos como “Viento en popa” o “Ecosurf” sino que también “los hemos llevado a la costa, a clases con los guardavidas y la idea es que puedan aprender nociones de surf”.
Cervetti explicó que gran parte de los que hoy están participando “no conocían la playa o no sabían nadar”.
En otro orden, se mostró feliz por la aceptación y la respuesta de la comunidad que se sumó rápidamente a las iniciativas. Añadió que “hay 20 chicos participando y se van a formar otros grupos porque tenemos una lista de espera”.
Los interesados en acercarse pueden concurrir los martes y jueves, a las 10 horas, a orillas de la Laguna del Sauce. Para llegar a la zona es necesario ingresar al barrio La Capuera y continuar hasta el tramo final de la calle De las víboras.
Viento en popa
La iniciativa, que cuenta con el apoyo de la Dirección General de Deportes y la Dirección de Juventud de la IDM, se viene desarrollando con una excelente aceptación por parte de los niños de La Capuera y zonas aledañas. Un equipo de profesores se encarga de brindar las clases y de transmitir valores y enseñanzas sobre navegación.
Esta propuesta, que está dirigida a niños y jóvenes a partir de los 12 años, desembarcó en Maldonado a través del Instituto Nacional de la Juventud (INJU) y cuenta con el apoyo de la Intendencia de Maldonado.
Ecosurf
El proyecto consiste en la fabricación de tablas de surf y paddle surf utilizando botellas plásticas recuperadas de las playas y la promoción de estos deportes mediante clases dirigidas a niños. Su implementación cuenta con el aporte de la Secretaria Nacional del Deporte, el grupo solidario Unidos para ayudar, la Dirección General de Deportes y la Dirección de Juventud de la IDM.
Se aspira a favorecer el cuidado del medio ambiente y sensibilizar a la población sobre las consecuencias que tiene arrojar residuos en las playas. Asimismo, se pretende trasladar esa experiencia a los más pequeños y sus familias.
Respecto al armado de las tablas, la primera etapa consiste en limpiar los envases, sacarles la tapa y colocarlos en el congelador. Posteriormente, se les vuelve a poner la tapa, se pegan los envases con silicona y caño de polietileno y, por último, se suma una alfombra.