En la última sesión de la Junta Departamental de Maldonado se generó una fuerte polémica en torno a la reiteración de un pedido de informe sobre la recolección de residuos en el municipio de Pan de Azúcar.
El edil del Frente Amplio, Juan Urdangaray, solicitó someter a votación la reiteración de un pedido de informe presentado en 2022 (Expediente 37/2022), que nunca fue respondido por el Ejecutivo. En primera instancia, la solicitud fue aprobada. Durante su fundamentación, Urdangaray expresó:
“Hace años que venimos reclamando información sobre la recolección de residuos en Pan de Azúcar y el Ejecutivo nunca respondió. Con esta reiteración, damos trámite a un pedido de 2022 que continúa sin contestar. En otros casos de 2024, tras insistir, sí obtuvimos respuesta. Esta falta de transparencia es reiterada desde el primer gobierno de Antía, y en algunos casos estamos analizando recurrir a la Justicia por la negativa del Ejecutivo a brindar información”.
Posteriormente, la edila nacionalista Andrea Vicentino solicitó rectificar la votación y votó en contra. Justificó su decisión señalando que, si bien estaba de acuerdo en reclamar informes, no compartía “las formas” en que Urdangaray había hecho sus planteos:
“En la primera instancia voté positivo, porque pedir informes es un derecho. Pero no acepto que se falte el respeto en la fundamentación. Una cosa es votar con respeto, y otra es gritar como si estuviéramos en un boliche. Por eso cambié mi voto”, afirmó.
La discusión se reabrió cuando la edila frenteamplista Karina Gómez defendió el derecho de los legisladores a pedir informes, señalando que la democracia exige respeto también a las minorías:
“El derecho a la información de un edil es también el derecho a la información del pueblo de Maldonado. No se trata de dar clases de moral, sino de garantizar el contralor que corresponde a esta Junta. No podemos avasallar ese derecho”, afirmó. Con su intervención, se pidió una nueva votación que resultó afirmativa (23 en 30).
Por su parte, el edil nacionalista Varela cuestionó la postura del Frente Amplio y defendió la decisión del plenario de no estar obligado a aprobar todas las reiteraciones:
“Es falso afirmar que el plenario está obligado a votar las reiteraciones. El edil tiene derecho a solicitarlas, pero el cuerpo es soberano para aprobarlas o no. No se puede acusar al plenario de avasallar minorías por ejercer esa facultad. Hay otros mecanismos, como los llamados a sala, que también se pueden usar”, sostuvo.
Finalmente, tras tres votaciones y un debate cargado de acusaciones cruzadas, la Junta aprobó reiterar el pedido de informes sobre la recolección de residuos en Pan de Azúcar.