En enero, el Departamento de Estafas de la Jefatura Policial recibió una denuncia por estafa presentada por una mujer residente en San Carlos.
La denunciante relató que realizó una compra a través de una red social, coordinando con la vendedora y enviándole un giro por la cantidad de $2,500 pesos. Sin embargo, la vendedora incumplió con el envío de los productos y dejó de comunicarse con la víctima.
Durante la investigación, los agentes localizaron a la denunciada, identificada como Y.D.H.M., de 23 años y residente en el barrio Hipódromo. Se descubrió que existían diez denuncias de estafa en su contra, presentadas en diferentes jefaturas policiales del país.
Una vez interrogada y recopilada la información pertinente, la Fiscalía de 3er Turno fue informada, y dispuso la citación de la acusada para comparecer en su despacho, en presencia de asistencia legal.
Tras la audiencia celebrada en el Juzgado Penal de 11º Turno, se emitió una sentencia condenatoria contra Y.D.H.M. como autora penalmente responsable de múltiples delitos de estafa, imponiéndole una pena de diez meses de prisión. Sin embargo, esta pena fue sustituida por un régimen de libertad condicional por el mismo periodo, con la condenada asumiendo las siguientes obligaciones: 1) residir en el domicilio denunciado en la comparecencia, 2) someterse a la orientación y vigilancia de la OSLA (Oficina de Supervisión de Libertad Asistida), 3) presentarse semanalmente en la Seccional Policial correspondiente a su domicilio, 4) cumplir con servicios comunitarios durante dos horas al día, una vez por semana, durante un máximo de diez meses, y 5) cumplir con dos meses de arresto domiciliario nocturno, de 22:00 a 06:00 horas.