El jefe comunal lamentó el perjuicio para los que pierden el jornal, para las familias que esperan el realojo y para las empresas de Maldonado.
Enrique Antía se apersonó esta mañana sobre las 8.00 en el obrador donde se están terminando de construir las viviendas para las primeras 375 familias que serán realojadas como parte del proyecto más grande del país y de su gobierno en solución para quienes viven en asentamientos como es el caso del realojo del Kennedy.
En el mismo la IDM invierte un monto de 55 millones de dólares, 35 que obtuvo por un crédito entre la CAF y el BROU, que paga Maldonado con recursos propios, y que fue posible gracias a la garantía soberana que permitió el gobierno nacional acceder a este financiamiento internacional.
En la obra el intendente constató que el paro de quienes realizan el cordón cuneta, que tuvo lugar este lunes y continuó hoy, va a retrasar el realojo previsto porque se trata de la terminación final de todo el fraccionamiento para los ajustes de jardinería y necesaria para poder presentar el barrio.
Sostuvo que hay un atraso de 2000 metros de cordón cuneta por hacer, al que se suma al paro total de la semana pasada, el cual graficó señalando que de 5 días de trabajo, solo lo hicieron un día y medio.
Para Antía el paro es una señal de lo difícil que es trabajar en estas condiciones.
Debido a los paros la IDM corrió la fecha del realojo, que estaba prevista para el 1 de febrero.
“Se trabaja con dificultad y no hay certeza” sostuvo Antía.
Recordó que la inversión de 55 millones de dólares es del pueblo de Maldonado para el pueblo de Maldonado que vive en condiciones indignas, al tiempo que lamentó que ante esta situación se esté “preso” de las medidas que no hacen excepción con las viviendas para asentamientos.
A esto agregó los paros que se han constatado en las cementeras, que impide la entrega de hormigón, y eso está perjudicando la obra en general en Maldonado.
Antía dijo que es un golpe muy fuerte para el trabajo de Maldonado y recordó que el departamento es el que a nivel país tiene el mayor número de obreros de la construcción, donde hay más obras, donde se han recuperado jornales durante todos estos años, pero ahora estas movilizaciones traban el desarrollo del departamento y son “malos mensajes” para los inversores.
Dijo que hace tres meses hubo un acuerdo a nivel nacional con el SUNCA y se había resuelto ordenar todo el año para que no se llegara a medidas, pero ante cualquier cosa viene el paro.
El intendente llamó a la reflexión y dijo que los paros los toma como elemento de movilización por parte de los sindicatos para fortalecerse gremialmente, pero también esconden motivos políticos detrás.
Antía dijo que la pérdida de jornales es una mala señal para las familias de la construcción y “habiendo trabajo perder las oportunidades desestimula, porque hay gente que preferirá comprar prefabricado para no complicarse la vida porque se están zarpando”.
En tanto el arquitecto Fernando García Miranda, responsable en territorio de la obra del realojo explicó que en estos días debería terminarse el cordón cuneta, pero este lunes hubo que cortar la jornada y dejar de hacerlos ante el pedido del sindicato de la construcción de no trabajar con hormigón.
Auguró poder seguir para terminar la obra y poder entregar las viviendas lo antes posible.
Culminado el cordón cuneta, García Miranda dijo que vendrán las terminaciones necesarias previo a la entrega.
“A este ritmo se nos va a demorar todo” lamentó.
Más allá de eso, siempre y cuando no existan medidas sorpresivas, se trabaja para la entrega de 375 viviendas que comenzaría en febrero y continuaría en marzo y abril.
El arquitecto dijo que hay una expectativa muy grande por parte de las familias, que están angustiadas por este atraso, porque se van a una vivienda muy superior, regularizarse y estar en un nuevo barrio con todos los servicios.