El jefe comunal señaló que la puesta de sol con la que se inició el fuego de la paella es un “augurio” de una temporada que “va a dejar una marca”.
Destacó a Piriápolis como destino, afirmando que hay mucha gente que trabaja para ello y el rol que le cabe al Gobierno de Maldonado es acompañar, apoyar y apuntalar, porque “Piriápolis se juega todos los años el futuro”.
Enrique Antía sostuvo que la paella cada vez sale mejor y hacerla el 10 de diciembre es una señal de que la temporada comienza antes y está al alcance de la mano. Dijo que esta fecha es importante porque la gente que hoy viene repite más adelante en compañía de amigos y familiares la elección del destino.
Animó a que la gente no espere hasta último momento, sino que concrete las reservas porque el nivel de consultas es muy alto.
Sobre la temporada estival el intendente opinó que Maldonado va a estar presentado “de calidad” y agregó que los empresarios son conscientes del momento de recuperación del turismo y por ende son muy cautelosos en materia de precios.
La paella de Piriápolis es un clásico que lleva 23 años.
Son unas 3500 porciones que se elaboran con 350 kilos de arroz, 600 kilos de mariscos, 400 kilos de carne y 200 de verdura, además de 80 litros de aceite y 1200 litros de caldo.
Año tras año busca un fin solidario. En este 2022 los beneficiarios fueron la ONG Maestra Juana Aguerra y Ades Uruguay.